Noche de alcohol [Byo & JR]

-Se retiró por un instante de sus labios y murmuró- Muy bueno -suspiró con fuerza y volvió a dejarse llevar por sus labios y el frenético beso, devolviéndoselo bruscamente sin nisiquiera darse cuenta, en ese momento, las tensiones que pudiera tener las liberó a través de esa acción, se agarraba a su ropa y se acercaba a él todo lo que le era posible, casi descontrolado por el ambiente sensualmente reconfortante-

-nota su descontrol y eso le gusta, las ñoñerías en acciones como esa reamlente poco le atraían, respiraba por la nariz, deseaba aprobechar ese frenético beso hasta el último momento. Rodea su cuerpo con ambas manos e introduce en los bolsillos traseros del pantalón sus manos, haciendo algo de presión en su trasero, haciendo que ambos miembros se rocen a pesar de estar la ropa-

-Ni siquiera podía respirar por la nariz de lo excitado y alretado que estaba, había aguantado la respiración hasta ahí de modo que no pudo más y se retiró un par de centímetros, lo suficiente para poder coger aire y sentir el aliento del japonés en sus labios humedecidos, rojizos e hinchados.-

-en ese preciso instante cogía aire por la boca, sin pensarlo se lanzó a por su cuello sin importarle nada. Estaba invadido por la excitación y eso lo volvía loco, le volvía loco él. Todo.-

-Su corazón latía tan rápido que se podía sentir en prácticamente todas las partes de su cuerpo, sentía puro descontrol, su respiración, su tacto, la manera que tenía de mirarlo lo excitaban, podía sentir lo frenético que estaba y la facilidad con la que se lo estaba contagiando, adoraba cómo le hacía suyo con besos y de todas las formas de las que era capaz de hacerle perder el control-

-lamió su cuello con la punta de la lengua, casi rozándolo, llegando a su oreja la cual mordió y tiró levemente del pendiente que tenía en ella-

-Un gemido se escapó de entre sus labios a la vez que su ceño se frunció, estaba tan excitado que su cuerpo temblaba al hacer cualquier movimiento, la respiración irregular, se agitaba a medida que pasaban los segundos-

-ladeo una sonrisa aún estando pegado a su oreja, la dejó ir para susurrarle de la manera más provocativa que supiera- estás muy...cachondo.. lo noto perfectamente por.. -mueve la mano hasta su miembro y lo acaricia- esto.. -vuelve a lamer su oreja y desciende por su cuello. El ambiente cada vez estaba más cargado, ellos no llamaban la atención por el hecho de ser hombres ya que, como ellos había muchos, sino por la notable diferencia de edad y la belleza de ambos-

-Alzó los brazos llevándolos hacia su cuello y rodeándolo al sentir cómo lo acarició. Su cuerpo temblaba mientras emitía suaves gemidos ya no solo por el hecho de las caricias del mayor, sino por el placer que le producía todo lo que le rodeaba- Si...estoy muy cachondo...-gimió una vez más a medida que se aferraba a él y se acercó a su cuello, lamiéndolo de abajo a arriba con lentitud hasta que lo mordió con algo de fuerza- muy cachondo...

-frunció el ceño y arrugó un poco la nariz al notar el mordisco, a su vez dejó ir un pequeño gemido- de..deseas que te toque.. no puedes negármelo.. -continuó tocando su entrepierna por encima del pantalón. Notaba su temblor, le gustaba, le encantaban las reacciones propias de un joven de su edad al ser tocado-

-Los gemidos no cesaban, al contrario, cada vez eran más constantes y rasgados, los alargaba bastante ya que sabía que escucharle de esa manera a Byo lo provocaba aún más. Pasó a tirar de su ropa con fuerza, encogiéndose levemente ante el placer- Tú también deseas tocarme...y tampoco puedes negármelo..¿mm?

yo no niego absolutamente nada, quiero tocarte.. -empieza a susurrarle al odío a medida que hace cuanto va dicidiendo- quiero.. meter la mano.. -mueve la mano hacia el borde del pantalón y la introduce bajo la ropa- bajo la ropa y tocarte.. -lame su oreja-

-El suspiro que dejaba ir en ese momento se entrecortó al sentir la mano bajo su ropa, al sentir el calor de la lengua en su oreja gimió con un poco de fuerza y cerró los ojos. Se agarraba a su ropa ya que las piernas le flaqueaban, dejando su frente apoyada en su hombro- Tócame...

-lo movió rápidamente haciendo que quedara ahora él apoyado en la pared, al estar en una esquina, algo alejados, nadie notaría nada, tampoco los miraban por lo que no tenía demasiada importancia, el hecho de tocarlo en público aún era más excitatante. Introdujo ahora una mano bajo su camiseta, llegando a su pecho, en concreto, a uno de sus pezones el cual acariciaba y apretaba según le convenía, la otra mano, tocaba su miembro aunque no con demasiada libertad ya que estaba el pantalón-

-La espalda chocó contra la pared provocando que un suspiro seco escapara de entre sus labios, lo miró muy fijamente mientras le dejaba hacer con total libertad, sin preocuparse de cuánto se le iba la mano o no, le daba igual, en ese momento se sentía suyo, deseado y en cierto modo querido. Apreciaba la compañía del japonés de tal manera que en cierto modo se sentía su sombra. Frunció el ceño al pensar que se estaba haciendo dependiente, algo que decidió que intentaría cambiar-

-acercó sus labios a su oreja, la cual lamió lentamente para luego susurrar en ella- me encanta lo mucho que se nota tu excitación.. -ladea una minúscula sonrisa, pega su cuerpo al suyo mientas la mano que se encuentra bajo el pantalón asciende un poco para librarse el botón y bajar la cremallera. Ahora tenía algo más de libertad a pesar de no ser totalmente de su agrado. Volvió a acariciar su miembro ahora con algo de fuerza. Sabía que se le iba de las manos, no tenía control con él, era consciente de que no podría hacerlo suyo en esas circunstancias por lo que se le ocurrió llevárselo al baño, pero por el momento, seguiría jugando con él-

-La cabeza le daba vueltas por el placer, el ambiente, el alcohol y el tabaco. Todo se le había juntado. Podía sentir a la perfección las caricias que el japonés ejercía sobre su miembro en el cual se podía ver la excitación. Quería ser suyo, en ese mismo momento, era en lo único que pensaba de modo que lo miró fijamente y murmuró- Hazme tuyo, ahora...lo quiero ya -su tono era serio a pesar de que entre sus palabras se infiltraban gemidos ahogados y rasgados, sabía que esas palabras excitarían al japonés de modo que las repitió de una forma más sensual- Byo...hazme tuyo -Cerró posteriormente los ojos apoyando la cabeza en la pared, las piernas empezaban a flaquearle y su cuerpo volvía a temblar-

-esas palabras definitivamente le hicieron perder el control, pero no podía hacerlo suyo delante de la multitud de gente. Divisó a pocos metros un hueco donde podría hacerle suyo sin miradas obscenas, lo condujo hacia allí en un beso mientras sujetaba sus pantalones para que no cayeran. El lugar estaba algo oscuro ya que no llegaban las luces. En cualquier momento cualquiera podría verlos, pero eso lo excitaba por lo que no pararía aunque se lo pidiera. Lo apoyó en la pared aprobechando su inestabilidad para hacer que se escurriera por ésta hasta quedar sentado en el suelo, observó que nadie pudiera acercarse y se inclinó mirándolo atentamente- repítemelo

-Lo miró con los ojos algo idos y pronunció las palabras con algo de dificultad debido a la excitación que sin duda alguna iba en aumento y de una manera vertiginosa, la voz le temblaba levemente, nada exagerado- Hazme tuyo Byo...quiero ser tuyo ahora -Gimió al sentir la pared algo fría en una parte destapada de su espalda, ya que la camiseta se le había subido un poco al escurrirse por la pared, lo miró muy fijamente a los ojos, esa mirada fría e inexpresiva pero en cierto modo cambiada lo observó atentamente-